Deportes.- Cody Bellinger conectó tres cuadrangulares y remolcó seis carreras en la victoria de los Yankees de Nueva York 11-0 sobre los Cachorros de Chicago, en lo que fue su primer enfrentamiento contra su antiguo equipo desde el cambio ocurrido en diciembre.
Aunque el jardinero aseguró que no jugó con ánimo de venganza, su actuación marcó un hito: se convirtió en el primer jugador en la historia de las Grandes Ligas en pegar tres jonrones en su debut ante un exequipo. Un posible cuarto jonrón fue frustrado por una espectacular atrapada de Kyle Tucker en la séptima entrada.
Bellinger fue cambiado por los Cachorros a los Yankees el pasado 17 de diciembre a cambio del lanzador Cody Poteet, pero demostró que aún tiene pólvora para encender los bates, extendiendo además su racha de bateo a 16 juegos consecutivos.
El primer jonrón llegó en la tercera entrada ante Chris Flexen, seguido por uno de dos carreras en la quinta contra Caleb Thielbar, y otro tablazo en la octava ante Jordan Wicks, también con un compañero en base. Fue su primer juego de tres jonrones en su carrera y el 18º con múltiples jonrones.
Bellinger ahora batea .285 con 16 jonrones y 54 impulsadas en su primera campaña con los Yankees. Su versatilidad y liderazgo han impresionado al mánager Aaron Boone, quien destacó su capacidad para reinventarse tras altibajos físicos y de rendimiento.
«Es un jugador ganador«, afirmó Boone. «Puede jugar múltiples posiciones, tiene calidad en el plato y velocidad, hace todo bien». Bellinger también recibió el respaldo de Aaron Judge, quien lo apoyó para ser incluido en el equipo All-Star de la Liga Americana.
El abridor Carlos Rodón aprovechó el respaldo ofensivo y lanzó ocho entradas en blanco con ocho ponches, logrando así su décima victoria de la temporada. La defensa también brilló con Judge haciendo jugadas clave en el jardín derecho.
A pesar de su dominio absoluto, Bellinger insistió en que el encuentro fue emocional pero no personal: «Lo pasé increíble en Chicago. Fue chévere ver a muchos de esos muchachos», dijo tras el partido, luego de saludar a los fanáticos en un ovacionado regreso.
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