El ingeniero Andrick Soto afirmó que el colapso del techo en la discoteca Jet Set no fue producto de una falla interna del concreto, sino consecuencia de una sobrecarga estructural.
“El derrumbe no pudo ser causado por un fallo interno del concreto, sino por la sobrecarga en el techo”, aseguró.
Soto también cuestionó el informe presentado por la defensa de los hermanos Espaillat, calificándolo como un intento de impresionar con tecnicismos sin fundamentos.
“El estudio portográfico, que es el análisis microscópico de las partículas del concreto, no es necesario en este caso”, explicó. “Las microfracturas del concreto, si hubiesen existido, habrían provocado el colapso en los primeros 20 días después de quitarle el soporte”, agregó.
📌 Antecedentes del local
El edificio donde operaba la discoteca Jet Set abrió en 1973 como cine, fue convertido en discoteca en 1994 y remodelado en 2010 y 2015. Estaba diseñado originalmente para albergar hasta 1 000 personas de pie y 700 sentadas. Contaba con techos de doble altura y equipos pesados (aires acondicionados, generadores, iluminación y sonido) instalados en la azotea. En 2023, un rayo provocó un incendio en el generador del techo. Aunque los bomberos autorizaron su reapertura, técnicos advirtieron sobre un posible debilitamiento estructural.
El ocho de abril de 2025, cerca de las 12:44 a.m., durante un concierto del merenguero Rubby Pérez, el techo de la discoteca colapsó repentinamente. Se estima que entre 500 y 800 personas se encontraban en el lugar. Equipos de rescate de 22 instituciones con más de 400 personas trabajaron durante casi 60 horas para recuperar cuerpos y atender heridos.
El colapso dejó 236 fallecidos y más de 180 heridos. Entre las víctimas se encontraban el cantante Rubby Pérez, los exjugadores de Grandes Ligas Octavio Dotel y Tony Blanco, la gobernadora Nelsy Cruz (hermana de Nelson Cruz) y ciudadanos de varias nacionalidades: estadounidense, española, haitiana, italiana y francesa.
Investigaciones del Ministerio Público y de expertos estructurales revelaron múltiples irregularidades. Se detectó la eliminación de columnas sin permisos, una sobrecarga en el techo por acumulación de materiales impermeabilizantes y maquinaria pesada, así como refuerzos improvisados sin estudios técnicos. También se analiza si las vibraciones extremas generadas por el sistema de sonido contribuyeron al colapso.
El presidente Luis Abinader declaró luto nacional y ordenó una investigación a fondo. El 12 de junio de 2025, fueron arrestados los propietarios del local, Antonio y Maribel Espaillat, acusados de homicidio involuntario, negligencia grave y manipulación de testigos. Antonio Espaillat es un conocido empresario del sector entretenimiento y medios.
Más de 93 demandas civiles han sido presentadas, y se han iniciado procesos de incautación de bienes vinculados a los imputados. En el Congreso se debaten propuestas de ley para reforzar los controles sobre establecimientos de entretenimiento.
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