Santo Domingo.- A casi 60 días de la tragedia del Jet Set, ocurrida la madrugada del lunes 7 de abril, los familiares de las víctimas aseguran que no han podido conciliar el sueño y que sienten un enorme vacío por la pérdida de sus seres queridos.
Juan Guillén, quien perdió a sus hermanos Luis y Milagros, así como a su cuñado Andrés Pichardo, expresó que desde entonces no logra dormir, afectado por el dolor y la ausencia irreparable que dejó la tragedia.
El pesar también se extiende a Jaina, una de las comunidades más afectadas, donde la tragedia cobró la vida de al menos 25 personas del municipio. Allí, ciudadanos como Alexander Figuereo y Bienvenido Frías, vecinos de las víctimas, aseguran que el dolor sigue latente.
En el sector Villapenca, también perteneciente al municipio, se percibe una tristeza similar. Amigos y vecinos del comerciante Joan Santana Pión lamentan su partida, así como la de su hermana y su cuñada, quienes también fallecieron en el suceso. Los comunitarios señalan que con el paso de los días, la tristeza se profundiza entre quienes conocieron en vida a las víctimas, y exigen justicia.
La tragedia ocurrió durante una fiesta en la emblemática discoteca Jet Set, amenizada por el merenguero Rubi Pérez, también fallecido en el lugar. El incidente dejó más de 180 personas heridas.
Según informó el vocero de la DJ Set, la conductora de un vehículo que colisionó frente al local se encontraba bajo los efectos del alcohol. El caso está actualmente en manos de la Fiscalía de Tránsito.
Mientras tanto, los familiares de las víctimas esperan los resultados técnicos que determinen las causas específicas del hecho, con la esperanza de que se haga justicia en torno a esta tragedia que ha marcado para siempre la historia del Jet Set y la vida de decenas de familias dominicanas.
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