Deportes.- El Oklahoma City Thunder se impuso con autoridad 114-88 a los Minnesota Timberwolves, en el primer partido de la final de la Conferencia Oeste de la NBA, con una brillante actuación de Shai Gilgeous-Alexander, quien lideró con 31 puntos.
El escolta canadiense sumó su quinto juego en esta postemporada con al menos 30 puntos y dos robos, y finalizó con una línea estadística destacada: 31 puntos, nueve asistencias, cinco rebotes y tres robos, siendo clave en el despegue del Thunder en la segunda mitad.
Minnesota arrancó con fuerza, en gran parte por los 20 puntos en la primera mitad de Julius Randle, pero la ofensiva se apagó tras el descanso, mientras que el Thunder despegó con un parcial de 32-18 en el tercer cuarto que quebró el encuentro.
Anthony Edwards, llamado a ser el líder de los Timberwolves, no estuvo fino. Fue limitado a 18 puntos con apenas 39 % de acierto, recibió una técnica por lanzarle el balón a Gilgeous-Alexander y no pudo influir como se esperaba, además, sufrió un golpe en el tobillo que pudo haber diezmado su juego.
Ningún otro jugador de la rotación de nueve hombres de Minnesota, más allá de Randle y Edwards, logró superar la barrera de los diez puntos. La estrategia de triples no rindió frutos, con un pobre 30 % de efectividad, al encestar solo 15 de 50 intentos.
Oklahoma dominó todos los apartados estadísticos importantes: ganó 56-50 en rebotes, 27-18 en asistencias y fue más eficiente en tiros de campo, con un 50 % de acierto frente al 35 % de los Timberwolves.
El segundo duelo está programado para este jueves en el Paycom Center, donde el Thunder ha promediado 125.7 puntos por juego en casa durante la temporada, cifra que pone presión a un Minnesota que necesita reaccionar.
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